03 septiembre 2012

Crónicas de Valsorth - Turno 17

TURNO 17 – Diecinueve de enero del año 340, montañas Kehalas.


Al regresar a Rocavalle, uno de los religiosos de Korth recibe al grupo, e informa a la abadesa Ruala de que el gigante por fin se ha recuperado. Los aventureros acompañan a la abadesa y se reúnen con el gigante, que les explica su historia.
Su nombre es Kon, un gigante del clan de la Roca Solitaria. Hace unos días, Kon salió a cazar en los alrededores, y regresó a las cuevas de su pueblo por la tarde. En la entrada, encontró huellas de varios gigantes que parecían alejarse. Cuando estaba examinándolas, un grupo de orkos salió de las cuevas. Sorprendido, Kun luchó por su vida, pero se vio a huir, malherido. Desangrándose, vagó por las montañas, hasta caer agotado, momento en que le encontraron los aventureros.
Una vez recuperado, Kon se muestra decidido a volver a su pueblo y descubrir qué ha sucedido. Pensando en que una alianza con los gigantes puede ser buena para el pueblo, los aventureros deciden acompañarle.

De este modo, por la mañana dejan Rocavalle y emprenden el camino hacia el este, avanzando bajo el embate de una tormenta de nieve. Al día siguiente, el grupo alcanza el peñasco de la Roca Solitaria, un risco rodeado de nieves eternas y bosques de abetos de hoja negra que crecen a su sombra.
Sin embargo, las cuevas aparecen desiertas, y no es hasta que llegan a la sala principal que descubren el cruel destino de los gigantes. En la sala, apilados, yacen los cuerpos de una quincena de gigantes, prácticamente todos los miembros del clan. Kon queda debastado por la tristeza, pero se sobrepone e insiste en que vio huellas de los suyos que escapaban al norte, aunque no entiende el porqué. Sin otra pista, el grupo sigue los rastros hacia el norte, y las huellas de tres gigantes les llevan hasta una encrespada colina con varias grutas que se abren en su superficie, las conocidas como cuevas de hielo. Por la ladera occidental se ve otra entrada, a muchos metros por encima de la primera y a la que sólo se puede acceder escalando por la pared rocosa de la montaña.
Tras examinar la entrada principal y ver que está vigilada por un yeti, el grupo decide escalar por la pared y entrar por la cueva superior. Allí se encuentran con una despensa donde hay almacenada suficiente comida para alimentar a un ejército.

Siguiendo con su exploración, el grupo recorre los pasadizos azulados, hasta llegar a un pozo cruzado por un puente de piedra. En medio del paso, se encuentran con una figura que permanece platada como una estatua. Se trata de un gigante azul, de poderosos brazos que sostienen un martillo de piedra. El gigante permanece paralizado, con su fría mirada posada en los PJs.
- ¡Es Bohd! -exclama Kon y da un par de pasos para saludar a su compañero.
Pero entonces un resplandor centellea en los ojos del silencioso gigante y, sin previo aviso, levanta su martillo y golpea, alcanzando a Kon con un tremendo impacto. El grupo reacciona atacando al gigante, y lo derriba antes de que acabe con su compañero.
Sin saber qué puede haber controlado así al gigante, el grupo sigue por los pasadizos hasta una escalera excavada en la roca que sube a un nivel superior. Aquí encuentran una sólida puerta de piedra, que parece imposible de abrir. Buscando otra salida, avanzand por un pasillo hasta una sala alargada. El suelo de la gruta ha sido alisado y las paredes son de piedra granítica, con una palanca de hierro negro al fondo. En el centro de la sala hay dos figuras de pie, inmóviles como estatuas. Se trata de dos enormes gigantes azules, que montan guardia de manera silenciosa y no parecerían más que estatuas si no fuese por el subir y bajar de sus pechos con cada respiración.
Mirul prepara un conjuro explosivo en el suelo de la sala, y una vez listo, alertan a los gigantes. Al explotar el conjuro, Orun se lanza al interior de la sala, pero al pisar sobre las baldosas, activa una trampa, y columnas de piedra surgen de las paredes para aplastar a los que están dentro.
En medio de este caos, el grupo lucha a la desesperada contra los gigantes, uno de los cuales acaba con Kon de un tremendo martillazo. Orun y Olf también caen malheridos durante el combate, pero Mirul desata sus proyectiles mágicos sobre el último gigante, que cae ante un mazazo de Fian.
Tras la dura lucha, sin apenas fuerzas y rodeados de enemigos, el grupo huye de las cuevas, escapando por las cuerdas por donde treparon. Sin mirar atrás, regresan al pueblo de Rocavalle, que alcanzan al mediodía de la siguiente jornada.





7 comentarios:

Cropenshield dijo...

Yo quería hacer una pregunta.

Se suponía que Nosolorol tenía preparado un libro llamado "Elfos de Litdanast" parecido a l "En compañía de gigantes". ¿Que ha sido de ese libro?

También me gustaría saber, si es posible, que otros libros es posible que salgan.

Gracias.

J.L.Lopez Morales dijo...

Buenas. En principio el libro de los elfos tiene que salir este otoño, a no ser que Nosolorol diga lo contrario.
Del resto de libros, hay otros dos suplementos ya escritos. Y lo que estamos acabando de escribir es el libro avanzado, que es un manual igual que el básico, pero con reglas avanzadas, aventuras y más criaturas. Puedes ver avances del mismo en este blog.

Cropenshield dijo...

¿Los dos suplementos escritos son "En compañía de gigantes" y "La guia del jugador"?

Y otra cosa. Los pdf que he descargados están protegidos y no puedo imprimirlos ni juntarlos en uno solo.

J.L.Lopez Morales dijo...

Hola. No, los dos suplementos escritos son inéditos, uno trata sobre los clérigos de Korth y el otro sobre los hombres salvajes (y siguen el mismo esquema que el de los gigantes). No hay fecha prevista aún para su publicación.
PDFs protegidos??? A cuales te refieres???

Cropenshield dijo...

Me refiero a los pdf de las aventuras sueltas y las dos campañas, rocavalle y la princesa de las llanuras.

J.L.Lopez Morales dijo...

En principio te ha de dejar imprimirlas. La protección es para no modificarlas, pero dime si es que hay algún error.
De todas formas, ya prepararé un archivo que agrupe cada campaña para que sea más cómodo.

Cropenshield dijo...

Al final las imprimiré por separado y acabo antes. Gracias de todos modos.